Cómo equilibrar la capacidad de los centros de datos con la responsabilidad ambiental

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No es ningún secreto que los centros de datos, que impulsan nuestro mundo interconectado, son consumidores voraces de recursos energéticos. Su consumo de energía y las correspondientes emisiones de carbono son preocupaciones apremiantes para aquellos dentro y fuera de la industria de centros de datos.

Casi todos los proveedores de centros de datos ahora abogan por las operaciones netas cero. Los líderes están apuntando a una fecha específica para lograr esta noble ambición. Al mismo tiempo, los proveedores de TI promocionan sus soluciones innovadoras, pretendiendo ayudar a sus clientes a reducir su huella de carbono. Pero en medio de estas promesas eco-conscientes, un vacío preocupante se hace evidente: la falta de datos cuantitativos.

Irónicamente, para una industria que prospera con datos, el sector de los centros de datos carece de datos completos y creíbles. Existe un déficit de datos con respecto a la capacidad de energía, el consumo de energía y las emisiones de carbono resultantes de las operaciones de un centro de datos. No tenemos una medida precisa del impacto ambiental de la industria. Como resultado, no tenemos un camino claro para cumplir con los objetivos establecidos de cero emisiones netas.

Progreso hacia los objetivos de cero emisiones

En los últimos años, la industria de los centros de datos ha visto un aumento notable en las reclamaciones orientadas a la sostenibilidad. En un esfuerzo por mantenerse competitivos, casi todos los proveedores de centros de datos están afirmando sus credenciales de sostenibilidad. Los proveedores de servicios en la nube (CSP) y los proveedores de colocación se comprometen a alcanzar emisiones netas de carbono cero en fechas objetivo específicas.

Además, los proveedores de TI se jactan de la eficiencia energética mejorada de sus últimos chips y equipos en comparación con los modelos más antiguos. Si bien estas afirmaciones a menudo son válidas y reflejan un cambio prometedor hacia prácticas más sostenibles, pueden dar inadvertidamente la impresión de que la industria de los centros de datos se está volviendo rápidamente más sostenible.

Los componentes individuales son cada vez más eficientes y las empresas están estableciendo objetivos de reducción de emisiones, pero el impacto ambiental general de la industria puede no estar disminuyendo necesariamente al mismo ritmo, especialmente teniendo en cuenta su continua y rápida expansión. Por lo tanto, existe una necesidad apremiante de datos confiables.

Las cifras precisas sobre el consumo de energía y las emisiones de carbono de toda la industria de centros de datos proporcionarían una evaluación más objetiva de su progreso de sostenibilidad. Estos datos ayudarán a identificar brechas y desarrollar estrategias para mitigar el impacto ambiental de manera efectiva.

Por lo tanto, si bien debemos aplaudir los esfuerzos y avances realizados hasta ahora, es igualmente importante validarlos con datos sólidos de toda la industria para garantizar un futuro verdaderamente sostenible para la industria de los centros de datos. En este sentido, IDC estima el consumo global de energía de los centros de datos en 2022 en 382 teravatios hora (TWh). Con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 16%, se alcanzarán los 803TWh para el año 2027.