Retos que afronta la dirección financiera ante el nuevo panorama ESG

La fecha límite para que más de 4.000 empresas españolas adapten sus informes de sostenibilidad arroja una transición crítica en el panorama empresarial. Tradicionalmente, la responsabilidad de recopilar, analizar y comunicar los datos no financieros ha recaído casi exclusivamente en los equipos de sostenibilidad de las empresas. Estos últimos, gracias a décadas de experiencia, han entendido la complejidad que involucra la construcción de los datos del Informe de Sostenibilidad, identificando la necesidad de contar con herramientas específicas que den respuesta a los procesos de negocio concretos de la información relativa a ESG.

En este contexto, emerge la figura del ESG Reporting and Internal Controller dentro del departamento financiero, bajo el paraguas del CFO, como nuevo actor en la gestión de los datos ESG y la elaboración del informe. Lo que algunos todavía no saben es que se enfrentan a un desafío mayúsculo: la gestión de datos no financieros es mucho más compleja que la gestión de datos financieros. La heterogeneidad de la información no financiera, su dispersión a través de múltiples departamentos y el incontable número de fuentes de obtención de estos, contrasta con el relativo orden que encontramos en los datos financieros y en la unicidad de los sistemas de los cuales la extraemos.

Si bien la integración de los financieros en la gestión de informes ESG ofrece nuevas perspectivas y oportunidades, también plantea desafíos que no se pueden menospreciar. Sygris sugiere la selección cuidadosa de herramientas especializadas donde gestionar todos los procesos relacionados con la gestión de la información ambiental, social y de gobernanza; y la comprensión profunda de la complejidad de los datos no financieros. Todo ello es crucial para garantizar el cumplimiento de la normativa, y la integridad y utilidad de los informes ESG.