¿Puede el trabajo desde casa reducir la huella de carbono?

En los últimos años, la sostenibilidad y la huella de carbono se han convertido en prioridades muy importantes para todo tipo de empresas. No es solo algo primordial para los líderes empresariales, sino también para la plantilla. La participación de los empleados, definida de manera amplia como el grado en que alguien involucra sus energías cognitivas, creativas y conductuales para lograr un resultado positivo, es fundamental para el crecimiento empresarial.

Las expectativas de los empleados están cambiando, y los trabajadores buscan encontrar satisfacción y elegir empleadores que estén marcando la diferencia. El vínculo entre los objetivos empresariales sostenibles y la participación de los empleados se está fortaleciendo cada día más. El trabajo desde casa o los entornos de trabajo híbridos pueden ayudar a las empresas a alcanzar sus objetivos de sostenibilidad y participación de los empleados, pero no necesariamente es una correlación simple. Se necesita una planificación estratégica para asegurarse de que esté configurado para reducir su huella de carbono.

Según la Oficina del Censo de EE. UU el trabajo híbrido y desde casa puede mejorar la sostenibilidad, pero avanzar hacia el cero neto requiere evaluar el lugar de trabajo digital y reducir la huella de carbono de sus dispositivos. Entre 2019 y 2022, el número de personas que trabajaban principalmente desde casa pasó del 5,7% (aproximadamente 9 millones de personas) al 15,2% (24,4 millones de personas). En 2022, aproximadamente el 69% de los trabajadores conducían solos al trabajo, en comparación con aproximadamente el 76% en 2019. Esto significa casi 9 millones menos de personas que viajaban solas en vehículos privados: 119.153.349 en 2019 en comparación con 110.245.368 en 2021. La utilización del transporte público para ir al trabajo pasó del 5% de la fuerza laboral en 2019 al 3,1% en 2022. En 2022, el tiempo medio de viaje al trabajo fue de 29,6 minutos.

Según estudios realizados por la Academia Nacional de Ciencias los trabajadores remotos podrían tener una huella de carbono un 54% menor en comparación con los trabajadores en la oficina. Los trabajadores híbridos con de dos a cuatro días de trabajo en casa pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) entre un 11% y un 29%.